Retrocedemos en el tiempo y viajamos al interior de uno de los emblemas del Patrimonio Nacional de España.
El último sábado de marzo, 7 familias asistieron a una visita guiada en el Palacio Real de Madrid.
El Palacio Real es uno de los más grandes del mundo. Sus más de 135.000 metros cuadrados y 3.418 habitaciones han sido testigos de siglos de la historia de España. Es una de las pocas residencias oficiales de Jefes de Estado que está abierta al público.
Tanto los padres y madres, como los niños, pudieron descubrir sus rincones, sus obras de arte y sus tesoros únicos, de la mano de Patricia, guía turística que de forma voluntaria hizo un recorrido especial por los espacios más representativos del Palacio.
Las actividades culturales promueven el aprendizaje, la reflexión y el diálogo en familia
Comenzamos con una breve introducción en la Plaza de la Armería y continuamos el recorrido por dentro del Palacio Real. El itinerario siguió por algunos de sus espacios: la Escalera Principal, los salones del Trono y de Columnas, la Real Cocina, el Comedor de Gala y la Capilla Real.
La visita tuvo un enfoque educativo e interpretativo para los niños, que facilita el disfrute y el conocimiento de un espacio histórico y cultural, haciéndolo accesible a las familias. Mediante la charla y el juego, practicaron las habilidades del arte, la ciencia y las matemáticas, utilizando recursos para explorar en familia. Contemplaron las inmensas oportunidades que ofrece el Patrimonio Nacional.
¡El saber no ocupa lugar pero abre el apetito! Para cerrar la jornada, todas las familias pudieron disfrutar de un delicioso menú en Foster's Hollywood de Ópera. Compartieron charlas y risas, además de una pequeña celebración de cumpleaños improvisada de una de las madres.
Este tipo de actividades culturales despiertan el interés y la implicación de los más pequeños en la divulgación de la historia. Es una fuente inagotable de inspiración para los niños, además de vincular su aventura educativa con sus padres y madres.